Tal y como señala el propio diario El Austral de Osorno en la portada del dia 11 de agosto, el humedal Los Sapos fue destruido producto de la expansión inmobiliaria de la ciudad, un fenómeno que tiende a repetirse en todos los sectores de Osorno y que amenaza a los ya fragilizados humedales en vías de protección.
Por lo tanto, es indispensable acelerar el proceso de declaratoria mediante la ley de humedales urbanos y exigir a las autoridades competentes el cumplimiento de la normativa.
La sociedad civil organizada ha asumido el liderazgo en la protección de los humedales de Osorno, generando información clave y propiciando la implementación de la normativa al respecto.
Es de esperar que instancias donde otros actores públicos y privados relevantes para el cuidado de los humedales, como la Mesa de Humedales de la Provincia de Osorno, puedan sumarse a estas iniciativas.
Actuar ahora es urgente, pues lo sucedido con el Humedal Los Sapos de Las Quemas puede repetirse mientras se tramita la declaración.
Todo parece indicar que los tiempos de desarrollo urbano no son los mismos tiempos de las leyes que lo regulan, por lo que generar información y conciencia en la ciudadanía, en especial en quienes viven en el entorno y se benefician de los humedales, es el punto de partida para su cuidado y mantención en el tiempo.
Para esto se pueden propiciar monitoreos comunitarios ciudadanos de los humedales que permitan generar información en tiempo real de las amenazas y reconocer los beneficios que entregan.